En nombre de la madre

Empezar a nacer en el cementerio no parece un buen presagio. Pero mirando esta mañana el resultado en el espejo he visto que tampoco está tan mal, salvo por la nariz aguileña de mi padre, los multicolores de una rosácea recurrente y la memoria de pez de mi familia.

A mi madre le dio tiempo a llegar al Hospital de Pamplona desde el Campo Santo sin mayores problemas y dar a luz a una niña pequeñita y gordita según cuenta la leyenda. Era el día de la Madre, el primero de Mayo.

Hemos perdido las buenas tradiciones y, sin duda para favorecer las compras, ahora se celebra la fiesta el primer domingo del mes. La Jefa se suele quejar, aunque ella no es muy dada a determinado tipo de fiestas.

Normalmente tardo una media de cuatro intentos en lograr hablar con mi madre por móvil, porque se mueve entre los prados del Baztán, los paseos por el Txingudi y las arenas del Levante valenciano, sin aviso previo. Ella sabe qué es importante:

– Una buena lectura de prensa que te ponga al día de la más rabiosa actualidad política, en alto, recortando artículos de opinión y subrayando frases lapidarias.
– Un buen aperitivo que te levante el ánimo y el apetito antes de llegar a la mesa con hambre de jubilado, pero degustando primer, segundo plato y postre, y si se tercia picando del cónyuge.
– Una buena siesta que contribuya a la buena digestión, siguiendo los consejos de Camilo José Cela, aunque sin el elemento perturbador, que permita recuperar la mente abierta.
– Una visión de novela televisiva que aunque no sea gran alimento intelectual, entretenga y llame al sueño si se ha catado una copita de vino.

Mama sin duda es una mujer que sabe disfrutar aunque los remaches que los bricoladores le han tenido que implantar en rodillas, caderas, espalda y …. Más. Muchos días está disipada pero es sólo porque su gran capacidad de socializar le hace olvidar que tiene que llamar, y la pobre se pierde en un mar de whasapp con mensajes filosóficos, inspiradores, protectores, provocadores, unas veces de texto, otras de imagen y a menudo de video. Porque para ella, lo más importante siempre es estar a la última. Amatxo maitia  gracias por no dejarme en el cementerio.

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6 opiniones en “En nombre de la madre”

  1. Uf. Ya veo yo de donde sale tanto potencial! tener Unos DE COLECCION trae consigo el someterse y sus efluvios. Sé de que me hablas, tuve una madre así. Y como decía mi abuelo: «con estos versos, fruto de mi numen ingenuo,en tributo a mis Padres de mis hijos anhelo/ Que posean las virtudes /Que he heredado yo de ellos / Porque así emocionado quedaré y satisfecho de lograr transmitirles lo mejor que les dejo….Julio Ribagorza
    Así se que, con este legado uno tiene que dar el largo en el Camino…y no parar…
    Viva tu madre!

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